viernes, 23 de enero de 2009

Flora Costarricense






Flora y Fauna en Costa Rica









Costa Rica es un país excepcional, un refugio extraordinario de vida, y lleno de sorpresas naturales, en cuyo territorio de 51. 100 km, que representa el 0.03 por ciento de la superficie del planeta, se encuentra aproximadamente el 5 por ciento de la biodiversidad mundial. Las formaciones vegetales varían según la altitud del suelo. En este sentido se puede distinguir la selva tropical, en los litorales del nordeste y del sur, donde las lluvias son más abundantes, presentando una vegetación de árboles de grandes dimensiones.En la zona montañosa del Atlántico, entre los 800 y los 1500 m. sobre el nivel del mar, la vegetación es característica del bosque tropical húmedo, mientras que el seco es el que predomina en la Meseta Central, donde crecen menos árboles, y en cambio, proliferan las gramíneas y las plantas herbáceas. La sabana se encuentra en Potrero Grande y en algunas zonas de Guanacaste.En las regiones más altas, predomina el bosque tropical mixto. Con respecto a la fauna costarricense, se puede decir que pertenece exclusivamente a la zona geográfica llamada neotropical, que abarca a la América del Sur, la Central, parte de México y las Antillas.
En Costa Rica es extraordinariamente numerosa y diversa, las especies que viven ahí, y según el área se tiene la posibilidad de observar, Quetzales, 5 o 6 especies de Tucanes, Dantas, Venados, Osos Hormigueros, Perezosos, Monos, Pizotes, Nutrias, Zorros, Jaguares, Ocelotes y Pumas, Lapas entre otros muchos animales. Además de las especies citadas, las áreas silvestres hospedan cerca de 13.000 especies de plantas, más de 2.000 especies de mariposas diurnas, 4.500 nocturnas, 163 de anfibios, 220 de reptiles, 1.600 de peces de agua dulce y salada.

tecnología en medicina




Tecnología y medicina.
La lucha contra las enfermedades y el dolor. Muchos han sido los médicos, investigadores que han ido desde la anestesia a la vacuna, pasando por el endoscopio y los antibióticos. Numerosos han sido los inventos y descubrimientos que se han producido en el último siglo y medio y que han permitido sentar las bases de la actual ciencia médica.
Estos avances han sido tan notables, y tal vez para muchos han pasado inadvertidos dado el ritmo tan acelerado que le ha dado la tecnología, que no hay que olvidar que hace sólo unos ciento cincuenta años parecía casi un sueño realizar una operación quirúrgica, por sencilla que fuera, sin que el paciente sufriera dolor alguno, cosa que se logró de manera satisfactoria con la aparición y aplicación del éter en 1842 por el médico norteamericano C.W. Long. Sin embargo aún existía un problema muy difícil de resolver, y que tal vez los médicos de la época no sabían de su existencia: la antisepsia y la asepsia; la antisepsia tiene que ver con operar en un medio limpio en el que se evite la propagación de gérmenes. Su implementación se dio a partir de 1867 cuando el Dr. Joseph Lister comenzó a realizar sus operaciones en una nube de ácido fénico pulverizado para eliminar los gérmenes, además usó este mismo compuesto para desinfectar todo cuanto intervenía en el proceso de una intervención quirúrgica